¿POR QUÉ ELEGIR KAJUKENBO?

     El Kajukenbo es un sistema de defensa personal directo y efectivo que busca la resolución rápida y contundente de un conflicto violento que una persona pueda sufrir. Nacido en la calle y para la calle, el Kajukenbo esta alejado de esas piruetas y trucos circenses que se ven en el cine o la televisión para centrar su objetivo en una extrema funcionalidad adaptada a todos los perfiles de practicante que podamos encontrar. Con la mirada puesta en artes marciales tradicionales, el Kajukenbo recoge sus conocimientos, los compara con las situaciones reales a las que una persona puede tener que enfrentarse y los adapta, completa o modifica bajo los principios de efectividad, sencillez, pragmatismo y como no, repercusiones lesivas y legales derivadas del acto de la legitima defensa.

     La evolución de las amenazas ha decidido la evolución del Kajukenbo, así como la evolución de las personas ha modificado su forma de aprendizaje. Cada perfil de practicante podrá encontrar en el sistema un método de trabajo y aprendizaje adecuado a sus gustos, desde la persona que quiere practicar un deporte para mantenerse en forma con el añadido de aprender defensa personal, hasta el practicante que desee rememorar aquellos entrenamientos durísimos que hicieron del Kajukenbo un sistema temido y respetado.

 

¿CÓMO SE APRENDE?

     El sistema tiene diversas técnicas y combinaciones, que aprendidas y practicadas proporcionan las herramientas necesarias para conocer la defensa personal. El conocimiento y práctica de estos movimientos de defensa, ataque, esquivas y demás se practica por parejas para que el practicante compruebe como un mismo ataque puede ser realizado de distintas formas por distintos atacantes, y como estos reaccionan de forma distinta ante la defensa. Desde la suavidad del entrenamiento con practicantes noveles, hasta la soltura y velocidad con los mas veteranos. Este es el eje fundamental del aprendizaje; el trabajo con los compañeros. Esto crea un excelente ambiente de aprendizaje en el que los propios practicantes evolucionan y hacen evolucionar a sus compañeros.

 

NO TENGO EXPERIENCIA EN ARTES MARCIALES...

     Nadie la tiene hasta que empieza a entrenar... No es necesario tener conocimientos previos de ninguna clase, el sistema esta diseñado para empezar de cero, de forma progresiva se adquieren conocimientos y destrezas que desarrollaran el conocimiento de la defensa personal, del propio cuerpo y del contrincante.

 

¿HAY CINTURONES?

     Si, el sistema cuenta con un sistema de cinturones con la finalidad de que cada practicante sepa donde se encuentra en el camino a recorrer, fijarse metas mas a corto plazo y obtener una justa recompensa por su esfuerzo y dedicación.

 

¿HAY EXÁMENES?

   Si. El mejor método para apreciar el progreso de un practicante es verlo cada día entrenado, por eso los cinturones hasta cinturón marrón los otorga cada maestro a su criterio tras realizar un examen en su propio dojo, lo cual no es impedimento para poder ser examinado de un grado a petición propia.

 

 

NO SOY UN ATLETA....

     La condición física no es un requisito a cumplir para la practica del Kajukenbo. Si bien es cierto que el sistema contiene un trabajo físico necesario, el sistema proporciona “herramientas”,para que cada practicante pueda utilizar aquellas que le son útiles, y entrenar aquellas que puedan llegar a serlo. Niños, mujeres, mayores... todos tienen cabida en el sistema, sin importar su condición física, en este aspecto en el entrenamiento se suele escuchar la frase “que cada uno llegue hasta donde pueda...”, sin mas, no somos sargentos de la legión...

 

¿Y LOS NIÑOS?

     Los niños son una figura primordial dentro del Kajukenbo. Son el futuro, y consideramos que los beneficios de la práctica del Kajukenbo para los niños son de aplicación en todos los aspectos de su formación y de su vida.

     Los niños aprenden valores como el respeto, el compañerismo, el trabajo en equipo... practican el autocontrol, la concentración, la coordinación, y todo lo anterior desarrolla una personalidad fuerte, segura de si, amable, tranquila y consciente, para que alcancen un mayor nivel de desarrollo personal y social en su vida en general.